Los agujeros de la memoria normalmente son abiertos por el taladro del olvido. […]
Nos pasamos la vida creando y perdiendo memoria. Como el pasado, a medida que pasan los años, crece en espacio, lo recordado también debería crecer. Sin embargo, gracias al trabajo tenaz del olvido, el pasado se va reduciendo y apenas nos deja unas pocas señales para que sepamos quiénes fuimos y también quiénes somos.
Los agujeros de nuestra memoria también nos permiten atisbar a otras memorias, que a su vez nos atisban desde sus propios agujeros.
Después de todo, el que sigue creciendo es el infinito y por eso no tiene fin.
Nos pasamos la vida creando y perdiendo memoria. Como el pasado, a medida que pasan los años, crece en espacio, lo recordado también debería crecer. Sin embargo, gracias al trabajo tenaz del olvido, el pasado se va reduciendo y apenas nos deja unas pocas señales para que sepamos quiénes fuimos y también quiénes somos.
Los agujeros de nuestra memoria también nos permiten atisbar a otras memorias, que a su vez nos atisban desde sus propios agujeros.
Después de todo, el que sigue creciendo es el infinito y por eso no tiene fin.
Mario Benedetti. Vivir adrede.
5 comentarios:
Haberá sempre o burato para mirar atrás, un oco que encher,...
Unha casa con número máis letra
4B??
" Olvidarte será fácil te lo digo
es cuestión de olvidar
que he nacido".O
El recerdo es el único paraíso del que no podemos ser espulsados.
EMPANADA
É a vantaxe que teñen os ocos: se nos interesa podémolos encher ou recordar e se non, podemos facer ciruxía e esquecer.
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